Mi primer camino del Rocio 1994

Esto lo escribo, como homenaje a nuestro amigo Juan, que es quien nos enseño lo que era hacer el camino, y que desde hace unos años esta en el Rocio del Cielo.
Nos fuimos en un todoterreno pequeño, Juan , Lucia, Luis y yo , y ya eso fue una odisea, porque llevabamos de todo y no nos cabia ni un alfiler, por la carretera los coches que iban tambien para el rocio, nos pitaban, y las carretas nos saludaban, ya eso, te va haciendo el cuerpo.
En Coria, el paso delSimpecado atravesando el rio en la barcaza es precioso, y enmedio se reza el Angelus, luego la acampada en Monte Colina, que es preciosa, y la misa que decia de noche Carlos Huelin para reventar....y luego los cantes en la candela, delante de el Simpecado....eso no tiene igual.
El camino andando, lo hicimos tres y uno conducia, pero unas veces Lucia y otras Juan pues a Luis no lo dejaban para que no se perdiera nada, todo esto hablando con unos que conoces, y si no los conoces es igual, te ofrecen lo que tienen y hay un ambiente de camaraderia que teniamos que tenerlo todo el año.
Luego viene el paso del Quema, que viene a ser como la primera etapa, rezo de el Angelus en mitad del rio y bautizo de los nuevos rocieros, despues de parada, comida y cante a Villamanrique...que es otra parada clave, alli la subida de losbuelles con el Simpecado hasta la iglesia, es sobrecogedora .
Luego la raya chica, que ya son caminos de arena, y....Palacio, que no se me olvidara nunca, la cara de alegria que puso Juan, cuando nos dijo que habiamos llegado alli..a Palacio.

Ya el ultimo tiron es pasar el Ajoli para entrar en el Rocio, alli es la alegria de haber llegado e ir a ver a la Virgen, que es el fin principal de un rociero.
Por supuesto, fuimos con la hermandad de Malaga, con quien hemos ido ya siempre, un poco por libre pero pegados a ellos.
Luego en el camino, esta lo mas bonito y enriquesedor, que son, los ratos de silencio detras de tu Simpecado, los de charlas con tus amigos, los del rosario o las misas, los del vinito y las tapas con todo el mundo, el boyero que en un paron canta una sevillana o un fandango a la Virgen, pues todo eso y mas, es el camino del Rocio.